Ene
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¿AÑO NUEVO, VIDA NUEVA?

¿Qué es lo que realmente ha cambiado con el inicio del nuevo año? Si es de los pocos que el primero de Enero se levantó temprano, habrá tenido la oportunidad de ver el sol saliendo por el mismo lugar de siempre; y al atardecer se volvió a ocultar por el mismo lugar de siempre. El día dos de Enero tuvo que ir a trabajar, como siempre; volver a ver a todas las personas que le caen bien, y las que le caen mal, que son bastantes, como siempre; aunque, como siempre, tenga que ponerles buena cara. Y cada día tendrá que resolver los mismos problemas laborales de siempre, y al regresar a casa afrontar los mismos problemas del hogar de siempre, a la vez que se siente frustrado porque el año nuevo ya llegó y usted no tiene el carro último modelo, ni el televisor inteligente de 80 pulgadas, ni tiene lo último en computación; ni los smart phones que usan usted, su esposa(o) y cada uno de sus hijos son del último modelo que apareció la semana pasada.

Pero tal vez lo más duro de todo será ver que su vecino ya consiguió todo eso y lo exhibe para que usted y muchos como usted, se mueran de la envidia. Como la situación se volverá “insoportable”, usted se endeudará hasta lo inimaginable para igualar o superar al vecino, quien, por cierto, tuvo que hacer lo mismo que usted, aunque usted no lo sepa. De repente sentirá satisfacción por haberse puesto “al nivel que requiere el año nuevo», y, de paso, provocar la envidia del vecino; satisfacción que empezará a apagarse  un mes después, cuando empiece a sentir la presión de los créditos, y empiecen a salir al mercado nuevos productos que usted no tiene y que “necesita tener”, porque la presión comercial ya se ha encargado de convencerle de ello.

Y… ¿cómo será la relación con su familia en el nuevo año? ¿Con su pareja, con sus hijos? ¿Cree que será mucho mejor sólo porque el año nuevo la va a transformar? ¿Sus hijos de repente van a tener un buen comportamiento, a traer excelentes notas y a no dar ningún problema? ¿Su pareja de repente será lo que usted al principio pensó que sería, pero que luego le fue decepcionando?

¿Qué es lo que realmente va a cambiar en el año nuevo? Absolutamente nada; los años son solo una referencia natural para medir el tiempo. Los números son un sistema inventado por el hombre; pero son las personas las que realmente cambian o no cambian. Si de verdad desea  que algo cambie en el año nuevo, significa que ese “algo” es usted mismo.  Olvídese de los carros, de las pantallas planas, de los smart phones y de todo eso. Si no lo hizo el primero de Enero, levántese temprano mañana mismo y asómese a la ventana, vea salir el sol y dese cuenta de que lo que trae el año nuevo es lo mismo que usted ha podido disfrutar cada día, pero que despreció.

Lo que a Usted le decepcionaba de su pareja, tal vez no sea más que lo que a ella le decepcionaba de Usted; si se plantea la vida partiendo de situaciones ideales solo tendrá ocasión de decepcionarse. Si había pensado en otra posible pareja tal vez sea porque ésta aún no había tenido ocasión de decepcionarle. Después de todo, y a pesar de decepciones, su pareja, la de siempre, es la que sigue ahí… igual que usted. Mire a sus hijos. ¿Qué espera de ellos? ¿Cuánto se ha involucrado usted en su atención y educación? ¿Qué les ha enseñado, y cómo? ¿Cuánto se ha preocupado de su evolución?

El tiempo no cambia; los años son todos iguales. Son las personas quienes los hacen diferentes. Si está decidido a cambiar, y mejorar su bienestar mental, realmente será un año especial, pero entonces… ¿Por qué necesita esperar a un año nuevo? Cualquiera es un buen día. Si tiene capacidad de disfrutar sin que haya motivo especial que disfrutar, ya tiene bastante para empezar; si, además, tiene una familia, ya tiene mucho. Deje que su vecino “disfrute” de su equipamiento, y disfrute usted de no estar sometido a los intereses comerciales. Disfrute de su familia y amigos; disfrute del sol y del aire; disfrute del conocimiento; del trabajo; de lo poco o mucho que tenga y no añore lo que no tenga.

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