Cada vez que finaliza un año, uno tiende a hacer un pequeño balance de cómo ha sido, a nivel personal, el año que termina; y a establecer unos propósitos para el año nuevo. Ese balance suele ser un tanto simple; normalmente nos limitamos a decir: “Bueno, no fue tan malo”, lo que equivale a darlo por aprobado, aún reconociendo que fue mediocre. El que los propósitos para el año nuevo sean muchísimo más elevados que los resultados reales del año viejo, confirma dicha mediocridad. Pero si tan alegremente hemos aprobado esa mediocridad, significa que con eso nos conformamos, que esa es nuestra referencia, con lo cual, los propósitos para el año nuevo se quedan en una simple declaración irreflexiva de buenas intenciones, de la que pronto nos vamos a olvidar, ¿O acaso no nos hicimos similares propósitos en años anteriores?
¿Por qué nos conformamos con la mediocridad?. Pues porque nos gustaría que todas esos propósitos sucediesen como por arte de magia, sin que implicara un esfuerzo y un serio compromiso. Estos dos términos, a los salvadoreños, en general, nos gustan poco o nada, y nos conformamos con cualquier cosa con tal de evitarlos. Pero cualquier propósito que no los incluya está condenado al fracaso, lo que explica por qué tales propósitos no se suelen cumplir, ante lo cual preferimos olvidar que ya los hicimos, para poder aprobar nuestro año, y los trasladamos al año siguiente, en que volverá a suceder lo mismo.
¿Quiere, de verdad, ser mejor en el nuevo año que en el pasado, y que realmente se cumplan sus propósitos? Entonces compare el resultado del año viejo con los propósitos iniciales. Casi con seguridad el resultado será negativo, y eso no le gusta ¿verdad?. Excelente, eso significa que usted es consciente de que algo tiene que cambiar. ¿Los propósitos? No, la actitud, el esfuerzo, y, sobre todo, el compromiso con usted mismo(a). No se haga propósitos muy elevados, pongase metas factibles, y si cree, como cualquiera, que usted merece el compromiso de los demás, empiece por darse ejemplo usted mismo. Es probable que así logre sus propósitos. Al año siguiente suba un poquito las metas.